Aibonito-Municipio

La historia escondida de Aibonito

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En la típica escuela puertorriqueña se enseñan aquellas materias que se consideran necesarias. Ciencia, matemática, español, inglés, educación física e historia, con alguna variación entre música y otros cursos. Pero es en la historia en la que nos estaremos enfocando, específicamente en la historia del municipio de las flores, Aibonito.

Este pueblo se conoce por su baja temperatura, en comparación al resto de la isla, y el Festival de las Flores en el verano. Pero no creo que con solo eso podemos encapsular el valor de Aibonito y es por eso por lo que debemos empaparnos de conocimiento sobre la historia que no te enseñaron en el salón de clases: la historia escondida de Aibonito.

Plaza de Aibonito (Suministrada)

Para conocer un lugar, vale más pasar por la experiencia de visitarlo, en lugar de solamente leer sobre el mismo. Pero no expondré datos que pudieras ver en Wikipedia con facilidad, sino que enumeraremos algunos lugares de relevancia histórica para el municipio que puedes visitar hoy mismo.

Comenzamos con un lugar que marcó el nacimiento de uno de los sistemas de salud de mayor crecimiento en el caribe. En el Barrio La Plata de Aibonito fue donde se fundó el Hospital General Menonita en la década de los 1940’s. La obra comenzó como parte del esfuerzo misionero de miembros de la Iglesia Menonita en Estados Unidos, quienes eran objetores por conciencia, por lo que decidieron no participar en la Segunda Guerra Mundial.

Hospital General Menonita en La Plata (Archivo)

El gobierno estadounidense les permitió realizar obras humanitarias en Puerto Rico en lugar de unirse al conflicto bélico, y entre muchas otras obras, establecieron el hospital. Luego, en el 1957, cuando el hospital creció, los misioneros lo vendieron a la comunidad por el precio simbólico de $1 y se transfirió a su localidad actual, donde se brindan servicios de salud a miles de personas del área central.

 

Hospital General Menonita actual (Suministrada)

Otro lugar de valor histórico es la Casa Federico Degetau, quien fue el primer comisionado residente de en la Cámara de Representantes de los Estados Unidos. Este lugar se encuentra a una corta caminata de la alcaldía de Aibonito y está bajo el cuidado del Patronato Histórico del mismo pueblo. Ahí se aceptan visitas y se brinda información de pertinencia histórica sobre Federico Degetau y de historia puertorriqueña en general. También cuentan con reliquias de siglos pasados y guías para enriquecer tu visita.

Degetau frecuentaba visitar un lugar para contemplar sus pensamientos y realizar escritos. Era en “La Piedra”, que ahora lleva su nombre donde se alejaba del vaivén diario. Hoy día, El mirador La Piedra Degetau es un destino turístico donde se puede divisar la costa sur de Puerto Rico. También cuenta con un restaurante para que no pases hambre en tu paseo.

Ahora bien, hay 2 edificios antiguos que quiero destacar. El primero se construyó hace casi 200 años, en 1830, pero no luce tener esa edad. La Antigua Tabacalera hoy funge como un centro de actividades comunitario y a su vez como en museo de historia aiboniteña. Justo al lado de la misma está uno de los establecimientos gastronómicos más populares del municipio: Granos Coffe Shop, por si una taza de café hace la diferencia entre visitar La Antigua Tabacalera.

Antigua Tabacalera de Aibonito (Archivo)

El otro edificio al que aludí se construyó en 1915 como una residencia, pero hoy, bajo la administración la de Iglesia Menonita de Aibonito, se ha convertido en un oasis espiritual. La Casa Ulrich es un espacio tranquilo, hecho de una casa del pasado siglo que fue restaurada por manos de misioneros y voluntarios, tanto de Estados Unidos como de Puerto Rico. El Patronato Histórico de Aibonito también aportó a la restauración de la casa y hoy cualquiera puede visitar para recibir orientación espiritual en un espacio sereno y placentero.

Casa Ulrich (Suministrada)

Aibonito tal vez no sea el pueblo más reconocido o famoso, pero en cada pueblo hay valor histórico que pocos apreciamos. Con que visites alguno de los lugares aquí expuestos, podrás experimentar la cultura aiboniteña más allá de lo posible con tan solo leer lo que te presentaría una búsqueda de Google. Anímate y ve a pasear en las alturas de la Isla del Encanto. Aibonito te espera con brazos abiertos, aunque talvez un poco fríos…

Aquí dejo el enlace de un mapa interactivo donde está todos los lugares que menciona el escrito. Puedes aportar añadiendo aquellos lugares de valor histórico que no están presentes.

 

Author: Samuel Lassús Rolón