Sin madera, no hay “Emmadera”

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La empresa local dedicada a la industria de la madera busca vender la pieza ideal, pero hacer de la experiencia del cliente, una completamente sensorial y en búsqueda a la integración de la comunidad artesana de Puerto Rico.

Una administradora pública y una especialista en mercadeo, unieron esfuerzos para “tallar” el futuro de la empresa local “Emmadera”, dedicada al arte en la materia prima que, con el paso del huracán María, se convirtió en el producto principal para emerger la industria de la artesanía puertorriqueña.

Al final de una carretera improvisada en piedra, se encuentra localizado el “hangar” de 25 pies que aguarda la madera nativa y donada para la creación de diversos artículos que complacen la demanda de los consumidores locales. Estamos en el barrio Certenejas del pueblo de Cidra, sede y hogar de su negocio, fundado hace más de un año tras un sueño de vida de su administradora, Emma García. Paola Freire, por su parte, realzó el concepto con sus conocimientos en mercadeo y por consiguiente, en la psicología del color. 

La necesidad por generar un ingreso tras el paso del fenómeno atmosférico, levantó su entusiasmo en trabajar para la industria de la madera en Puerto Rico y la artesanía local. Sin embargo, su visión del concepto va más allá, pues va en búsqueda de utilizar la madera integrando el color y a largo plazo, los servicios en la comunidad. En entrevista para Nación Social, las dos empresarias comparten su reciente experiencia como artesanas y los retos que como mujeres atraviesan en la industria. 

Chichí llenando la vida, de colores

La integración del arte con la comunidad es un factor que la empresa local Emmadera busca enfocar tras la necesidad de foros para que, en especial la niñez, pueda desarrollar eficientemente las destrezas motoras y la pasión por “lo local”. A través de la pintura, la madera, y objetos no punzantes, los niños pueden elaborar un personaje de acuerdo a sus características o gustos personales. Es el sentido de identidad que ameniza la experiencia de los pequeños, pues complace a la vista los colores que más les gusta como también el origen de los materiales que utilizan. 

“Chichí” es parte de la gama de personajes que las artesanas han creado para complacer al público. Desde regalos para familiares, hasta artículos para el hogar, las piezas se convierten en un emblemático símbolo de la empresa. 

Los personajes de Emmadera [Galería de fotos]

“Canterina” es representada en diversos personajes según los gustos del cliente, y es parte de la línea “Cantería”. [Emmadera: Facebook]
El pequeño “Chichí”, quien nació de los pedazos de madera del taller, es el “mini acompañante” de muchos. [Emmadera: Facebook]
Las “emperifollás” se adaptan a las características más queridas de los clientes, y tomaron auge para el día de las madres. [Emmadera: Facebook]
Las “sillitas” adornan cualquier escritorio, o acompañan a los personajes.
[Emmadera: Facebook]

La empresa local también realiza otros trabajos en la madera; desde vineras, hasta Quijotes y cubos pequeños para suculentas. 

NOTA: Agradecemos la apertura de la empresa local “Emmadera” para conocer más sobre el uso de la madera y su industria en la artesanía puertorriqueña desde la perspectiva educativa y el emprendimiento local. 

Author: NataliaAlmedina Centeno