No hay situación más frustrante para un empresario con presencia en las redes sociales que perder el control de sus cuentas, o como decimos en Caguas, que sean “hackeadas”.
La cantidad de cuentas personales y páginas de Facebook que constantemente son apropiadas por personas con distintas intenciones es alarmante. Aunque Meta no ofrece cifras exactas, sabemos que este problema es más común de lo que parece.
Seamos honestos: perder el acceso a una página de Facebook es una verdadera pesadilla. Pero igual o peor es la experiencia de tratar de recuperarla.
Sin embargo, este proceso puede ser más llevadero si contamos con toda la documentación necesaria digitalizada y lista para usar. Si nuestra página ha sido “hackeada”, lo primero es dirigirse a la sección de ayuda de Facebook, completar el formulario para páginas comprometidas y seguir las instrucciones. Esto incluye la verificación de identidad mediante documentos oficiales, como la licencia de conducir o el pasaporte.
Una vez se completa el formulario, se genera un caso. Recibirás comunicación de un representante del servicio de soporte de Facebook, quien te informará qué documentos son válidos para continuar el proceso. Aunque puede parecer sencillo, muchos documentos no son aceptados, y si la página no está vinculada a un negocio o entidad oficial, el trámite se puede volver largo y complicado.
Si logras superar “la zarza y el guayacán” de este procedimiento y recuperas tu página, es fundamental tomar medidas para evitar que esto ocurra nuevamente. Entre estas, activar la autenticación en dos pasos, revisar los permisos de los administradores y cambiar periódicamente la contraseña de tu cuenta personal.
Minuto empresarial es una columna del autor que se publica todos los jueves en la sección de Negocios del periodico El Nuevo Día