Uno de los factores que permitió que la masa conociera sobre distintos usos de la Inteligencia Artificial (IA), fue la avalancha de aplicaciones que podían crear variedad de artes a base de nuestras fotos. Ya te convirtieras en superhéroe o astronauta, las aplicaciones potenciadas por IA incendió la curiosidad por el tema y dejó saber que era algo más allá que un contestador automático y generador de imágenes.
Pero, y ¿en el mundo de los negocios? El empleo de imágenes generadas por inteligencia artificial se ha vuelto esencial en el ámbito empresarial, optimizando la creación de contenido visual, permitiendo a las empresas destacarse de manera única y atractiva.
Al utilizar herramientas para generar imágenes, como podría ser DALL‧E 2 (OpenAI) o Artiphoria, las empresas pueden comunicar de manera efectiva su mensaje sin depender exclusivamente de recursos gráficos convencionales. La rapidez con la que la inteligencia artificial produce imágenes garantiza una respuesta ágil a las demandas del mercado, sin depender de retrasos por acumulación de tareas de diseñadores gráficos.
Para los negocios, la imagen es algo clave, y más allá de ver a la IA como una amenaza, hay que visualizarla como herramienta para ayudar a mejorar la presencia visual de los negocios. En un futuro cercano, veremos cómo las empresas van a incorporar estas tecnologías para impulsar la presencia y la competitividad de cualquier negocio.
Minuto empresarial es una columna del autor que se publica todos los jueves en la sección de Negocios del periodico El Nuevo Día