Explicamos la semana pasada como YouTube es una buena alternativa para crear contenidos para nuestro negocio, sin embargo, quizás la manera en que queremos que nuestros clientes vean el mismo, no es la que queremos.
Explicamos. Es posible que tengamos un negocio con sala de espera, como puede ser un consultorio o taller, o uno donde estemos largo rato, como un banco o un supermercado. Aunque literalmente, si podemos conectar los videos de un canal de YouTube a los televisores del lugar, es recomendable otro tipo de soluciones más afín a lo que buscamos.
Existen servicios, la mayoría de ellos bastante fáciles de usar, donde podemos subir videos, ordenarlos por horario y compartirlos en distintas plataformas. A éstos servicios, les llamamos OTT (Over-the-Top), las cuales permiten compartir el material visual de manera directa con los usuarios, tal y como lo hace YouTube, Amazon o Netflix.
Servicios de OTT como Viloud, Flicknexs y Dacast se ofrecen mediante un costo, y a diferencia de las plataformas de ‘streaming’, están orientadas a ser una solución de negocio. No todo negocio necesita un canal de éstos, el costo de hacer los videos, la membresía de la plataforma OTT, y la configuración para un circuito cerrado de video, puede resultar elevado para pequeños y medianos negocios. Empresas con mayor volumen de ventas, podrían tenerlo y hasta monetizar vendiendo espacio a auspiciadores.
Minuto empresarial es una columna del autor que se publica todos los jueves en la sección de Negocios del periodico El Nuevo Día