A medida que cada año llegan al mercado nuevos teléfonos inteligentes y tabletas con mayor capacidad y características, curiosamente pensaríamos que por el contrario, su capacidad de carga de su batería disminuye.
Sin embargo, no es así y cuenta con una explicación, y esta no tiene que ver con que los equipos vienen con baterías de menor capacidad, sino más bien, son funciones y aplicaciones que operan en el fondo (no vemos su operación), y que continuamente necesitan energía para su funcionamiento.
Hoy en día la gran mayoría de teléfonos inteligentes utilizan baterías de iones de litio. Los iones de litio ofrecen muchas ventajas pero se degradan con el uso.
Les quiero compartir algunos consejos que pueden ayudar a que la carga de nuestros equipos se sostenga por mayor tiempo.
Debido a que las baterías de iones de litio sufren mayor estrés cuando están totalmente cargadas o agotadas, un buen consejo es cargarlas parcialmente. Lo ideal es cargar la batería hasta aproximadamente un 80% y evitar que baje del 30%. Si esto no es práctico, intenta cargar a un máximo del 90% y comienza a cargar tu ‘smartphone’ antes de que llegue al 20%.
Por otro lado, cargar la batería de manera más lenta es bueno. Como tal, cargar su teléfono a través de computadora (desktops o laptops) resulta beneficioso.
Si no está utilizando WiFi y/o Bluetooth, debería apagarlos. Estas funciones agotan la batería al buscar redes o dispositivos a los que conectarse.
Seguiremos hablando del tema la próxima semana.
Minuto empresarial es una columna del autor que se publica todos los jueves en la sección de Negocios del periodico El Nuevo Día