La semana pasada iniciamos un análisis sobre el futuro de las redes sociales. Es importante recordar que, aunque parezca que estas plataformas son gratuitas para nosotros los usuarios, en realidad, hay todo un engranaje detrás de su creación y monetización a varios niveles.
Las tecnologías de realidad virtual (VR) y aumentada (AR), están llevando las interacciones en las redes sociales a un nuevo nivel, proporcionando experiencias más inmersivas. En lugar de simplemente escribir mensajes o compartir fotos, los usuarios pueden reunirse en entornos virtuales 3D, participar de eventos, o incluso trabajar juntos en proyectos.
Estas tecnologías ya han tomado prestado de los conceptos de redes sociales desde hace varios años. Los usuarios han tenido la capacidad de interactuar en directo utilizando avatares como medio visual de identificación.
En los próximos años, a medida que aumente el número de contenidos y plataformas sociales en realidad virtual, el costo de los equipos de acceso disminuirá, permitiendo que más personas puedan tener acceso. Esto es similar a lo que ocurrió con los teléfonos inteligentes. La adquisición de estos equipos también representa una fuente adicional de ingresos para las plataformas, como es el caso de Meta Quest para Meta.
Estamos viendo una nueva oleada de plataformas sociales que incorporan la realidad virtual, como Meta Horizon, VRChat, y Sansar (de los creadores del pionero Second Life). Sin duda, surgirán más plataformas que traerán mayores integraciones con fuentes de entretenimiento, creando una nueva economía digital en la que los interesados tendrán que invertir.
Minuto empresarial es una columna del autor que se publica todos los jueves en la sección de Negocios del periodico El Nuevo Día